Tras las columnas de este pórtico se encuentra un muro que, originalmente presentaba siete puertas de acceso alineadas con las siete capillas interiores del templo, situadas al fondo de la segunda sala hipóstila, la decorada por el propio Sety I y dedicadas, cada una de ellas a una deidad y al propio faraón deificado. En la actualidad, solo se conservan tres de estas puertas, pues el propio Ramsés II cerró las otras cuando modificó el plano original del templo diseñado por su padre, para añadir sus propias estructuras, es decir, la primera sala hipóstila y los patios y pórticos externos que hemos visto anteriormente.
Es en este muro, a la izquierda de la puerta central de acceso, donde Ramsés nos cuenta su visita a Abidos "el dia 23 del tercer mes de la primera estación "( la estación de la inundación a finales d eagosto, -primeros de septiembre) y como, habiendo encontrado el templo de su padre inacabado y en ruinas, mando su inmediata reconstrucción. El texto continua haciendo mención a la legitimidad de Ramsés para acceder al trono, haciendonos saber que su padre le legítimó para tal fin siendo un niño y habiendo actuado como corregente desde entonces.
La parte final nos habla de la feliz conclusión de las obras de restauración de este maravilloso templo y de como Ramsés lo dedicó a la memoria de su padre, el gran Sety I, ya justificado de voz, por aquel entonces.
No hay comentarios:
Publicar un comentario